El fascinante mundo de las colas


Hoy os voy a hablar de ese magnífico tema que son las colas. Ahora es cuando saltáis y decís: «El tío este ya no sabe de que hablar, ahora resulta que va a clasificar las colas de perros y gatos». Nada más lejos de la realidad. Podría hacerlo, pero no va a ser hoy. El tema que nos ocupa van a ser las colas y filas indias que sufrimos los humanos allá donde vayamos. Sea donde sea hay alguna cola que nos va a hacer esperar, y como la providencia, el azar o el hombre que sabe diseñar inteligentemente nos dio la virtud de la paciencia, somos capaces de aguantarlas. ¿Por qué? Porque es un mundo fascinante, sin duda…


Lo primero en lo que nos fijaremos de una cola es que existe. Sí, amigos, las colas son fascinantes, pero ojo, a veces son escurridizas. Tú llegas a un sitio que tú crees amigable, un lugar apropiado para ti en el que quieres ir a una taquilla o donde sea, y la cola, no sabes cómo, está escondida. Te acercas al mostrador porque no hay nadie y te colocas. «Qué bien, he llegado el primero». Ante todo ten en cuenta una cosa, la gente que hace cola nunca está de buen humor, es decir, la mala leche abunda en el ambiente. No los provoques. Una persona que se cuela delante de personas que llevan 3 horas esperando no está bien vista. Por lo tanto, si no has visto la cola, cierra la boca y huye antes de que te invadan hordas de «esperadores» con antorchas de fuego y estacas en las manos. Cualquier intento de razonar será visto como una provocación. El «es que no la había visto» es la excusa más usada por los expertos «coladores».


Bien, he introducido dos términos nuevos a vuestro vocabulario, y de paso si algún redactor del diccionario de la RAE pasa por aquí, que por favor, me mantenga los testículos intactos. Gracias. Por lo tanto, llegados a este punto, con o sin huevos, podemos entrar a ver qué dos tipos de «coleros» (gente que habita en las colas) hay. El primero es el esperador. El esperador es paciente y mantiene su turno en su sitio en cualquier momento, ante una posible intentona de colarse alguien, el esperador soltará toda su furia contra él. Hay algunos que, antes de ir de compras al súper, dejan al pitbull sin comer dos semanas y se lo llevan allí. A ver quien tiene huevos de colarse.


Y luego tenemos a los «coladores». Muy importante, no confundir con los «coleros», que son todos. Ni tampoco con esos utensilios que tenéis en la cocina. Se sienten muy mal cuando intentan escurrirles la escarola en la cabeza. Los coladores son aquellos que se intentan colar en alguna cola con la típica excusa de: «Yo ya estaba aquí y yo a usted no lo he visto en mi vida», la clásica «No había visto a la demás gente», «Aquí está mi cesto» o la más usada desde que éramos niños e íbamos a la escuela: «Tú me dejas pasar a mí y yo te dejo pasar a ti». Qué ya ves tú para qué servía colarte en la cola del colegio, si total, ibas a llegar antes a clase. ¿Y para qué cohone querías entrar primero en clase? ¡Si luego salías despavorido cuando sonaba el timbre!



Chiste gráfico: Forges.com



Pero en fin, este no es tema que nos ocupe ahora. El caso es que los «coladores» intentarán colarse, valga la redundancia, siempre que tengan la ocasión. Cualquier momento es bueno. Son personas poco propensas a esperar, siempre que la de Telefónica le dice: «Espérese un momento que ahora vamos a ponerle una música de mierda para que se tire 5 minutos de pie esperando con la oreja al teléfono» pues el «colador» siempre cuelga. Y es lo que deberíamos hacer todos, pero esto tampoco entra en el tema. No os importa, ¿no? Pues nada, yo sigo.


El caso es que estos dos tipos de personajes coleros se encuentran siempre y provocan no pocos follones. Siempre hay alguien dispuesto a colarse y siempre hay alguien dispuesto a quejarse. Para que nos pongamos en situación, hay dos tipos de colas básicas, las que están numeradas y las que no. Las que están numeradas son fáciles de llevar, los «coladores» más profesionales han adquirido en clases de magia y de dar vueltas por las ramblas, la capacidad de pegar el cambiazo a cualquier tío o tía que tenga un número más favorable para ellos. Pero aparte de gente que sabe robar, las colas numeradas no tienen mucho misterio. Ahí están las de Renfe, que excepto los despistados que no saben que hay que coger número y los «qué más te da cogerme a mí si el 135 se ha ido y no ha dejado en herencia su número». Aparte de estos, no hay mucho problema.


El problema está en las no numeradas. No numerar algo es un problema muy gordo. De todas formas aquí podemos subdividir las colas no numeradas en tres apartados. Las de «quien da la vez»,las de «fila india» y las de «alabulié» o en castellano «al barullo». Las de alabulié, que es un grito en clave sacado de un anuncio que ya no me acuerdo cual era, es cuando hay una cola posible, pero que luego todo el mundo se la pasa absolutamente por el forro. Véase el cine cuando no hay sesión numerada, la gente se agolpa a la cinta de seguridad, que no deja pasar nadie. La cinta es la mar de segura, es como una pared, es muy difícil saltársela, sí, sí. Nadie se atreve por si les dan descargas eléctricas o algo. El caso es que cuando el acomodador abre cinta sale la gente en manada e incluso salta por encima de los sillones para coger el mejor sitio. Yo creo que los cines a veces se compinchan con los dentistas para que en los saltos esos alguien pierda tres o cuatro dientes y tengan más clientes. Va por ahí la cosa.


Otro ejemplo claro sería el del hospital. Os explico la situación de mi hospital. Cuando se va a hacer un análisis de sangre siempre es a primera hora de la mañana y está todo el hospital cerrado. Por lo tanto hay que esperar en unos asientos hasta que abren la entrada. Hay una ley no escrita que dice, el que llega antes es el que coge número antes. El aparato que contiene los tickets con los números está a unos 25 metros, más o menos. El problema es que en esos lugares abundan las personas de la tercera edad. Como todos sabréis, las personas de la tercera edad no son Carl Lewis haciendo los 100 metros lisos. Ni se le acercan. Por lo tanto, los que somos jóvenes, cabrones que somos, salimos a toda mecha a coger los mejores números para salir antes. «Joderos viejetes que no sabéis correr» sueltan algunos. Claro, ya nos tocará ser viejos, pero mientras tanto tiene sus ventajas ser joven. Por esa razón hay siempre más personas mayores en los hospitales, los jóvenes cogen buenos números y casi no esperan.



En fin, después de esta historia de jóvenes sin escrúpulos voy a seguir con la clasificación. «Ah, ¿qué hay más?» Por supuesto. Después de las colas de alabulié están las colas de quien da la vez. O mejor dicho, quien es el último. Que siempre llegas a una cola y hay algún chisposo que cuando dices: «¿Quién es el último?» va y dice: «Tú» Mientras se ríe por lo bajo. «Jijijiji» Tú, como aún no eres un esperador enfervorecido por el odio mantienes tus cabales firmes, al cabo de una hora esperando la posibilidad de meter al hombre en una cazuela y hacerle un rito satánico mientras hierve a fuego lento va cobrando forma. Este tipo de colas se suele ver en la carnicería y sitios así, como también el banco, donde los abuelos van a mirar la cuenta y forman colas más largas de la cuenta, valga la redundancia. Que es un tema para hablar otro día, por cierto. ¿Por qué los abuelos miran cada dos por tres su cuenta? ¿No se fían de que siga ahí el dinero?


Total. Que el último caso de cola es la de fila india. La típica cola del súper o de cualquier tienda vease Fnac o sitios por el estilo. Aquí la suerte radica en el hecho de que elijas bien la cola. La Ley de Murphy siempre ha dicho que la cola de al lado siempre va más rápida que la tuya, y la propia ley tiene un corolario que dice que si te cambias, la que irá más rápido es la que estabas. Así que hagas lo que hagas, como dijo Britney Spears, ponte bragas. Que viene a decir, que hagas lo que hagas la vas a cagar. Así que mejor ves preparado con algo debajo. Por lo tanto estas colas son los sitios donde más aumenta la pillería y donde más piques hay entre los «coladores» y los «esperadores». Sobre todo en el súper, que también es para post aparte, cuando los listillos de turno dejan el cesto en la cola para que espere por ellos y luego se van a la otra punta del súper a hacer la cola. Y cuando acaban dicen: «Es que yo ya estaba aquí». Cuando vendan robots a escala industrial, este será su primer uso. «Robots esperadores, no espere más en sus tiendas, él hará la cola por usted». Como si lo viera.


En definitiva, que a los humanos parece que nos gusta esperar. Tenemos una tendencia innata a hacer cola y luego encima, a mosquearnos por ello. Así que si hacéis cola echadle paciencia, que hace falta, y mucha. Que sino fuera por la paciencia ni existirían las colas, ni existiríamos nosotros.

15 Respuestas

  1. maerbale dice:

    se te ha pasado poner a los típicos abuel@s y a las marujas que intentan colársete descaradamente con el «hija, si seguro que no tienes nada que hacer, paso yo antes»…perdone, será usted, que está jubilado el que no tiene nada que hacer. y no es mi problema si tiene que ir a buscar a sus hijos o nietos al colegio. que no me interesa su vida, déjeme en paz! (reacción típica de esperador furioso…y luego q los jóvenes no tenemos respeto xDD)

  2. Zuviëh dice:

    Oye.. y esas colas que se forman justo cuando tú vas a ir a pagar en el súper. Te das prisa porque sabes que la caja vacía no va a durar mucho tiempo, y por mucho que corras, ya se habrá formado de nuevo la cola..

  3. Anonymous dice:

    Genial, esto de las colas…de veras que hay de todo. Pues habra quien chifle por que te metes a las colas y si se puede entrar en completa impunidad…total…hay de colas a colas…

    VOZJOVEN

  4. Angie dice:

    tambien estan las «colas-acampada» q se forman en los conciertos, gracias a esos «megafans» que se van tres dias antes (o incluso una semana antes, que tb los hay) del concierto para pillar 1ª fila y se llevan el saco de dormir, una sillita, la neverita con bebida fresquita, los bocatas, el radio cassette… joer!ni que se fueran de excursion de boy-scouts!!! jajajaja! bueno, bueno, esas colas es que son un mundo aparte…! al final, se hacen hasta amigos!

    Y cómo no… tb esta el típico «colador» que te dice que le cueles porque el sólo lleva 2 productos y tu llevas una cesta entera! pues te jodes, coño! que yo tb tengo ganas de pagar e irme!! jajaja

  5. morri dice:

    Bueno, ante todo enhorabuena por haber llegado al final del post y encima comentar, no creo que a mucha gente le queden fuerzas después de leerlo XDDD

    Maerbale: Lo de las viejas en las colas del súper se merece un post aparte, y es que las viejas creo que en cualquier sitio, son la ostia.

    Zuvieh: Sí, o ese que te adelanta justo cuando llegabas a la caja y encima trae un carro a tope… Grrr, qué rabia!

    Huicho: Sí Huicho, supongo que tienes razón pero deberías hacerme un croquis para entenderte el comentario. Lo siento hijo, pero no me he enterado de nada. xD

    Angie: Sí, era algo que tuve en mente mientras hacía el post y al final no lo hice. Pero sí, son bastante increibles las colas de 3 días a sol y sombra acampando para un concierto que luego anularán porque el cantante está viejuno ya y no aguanta, veáse los Rollings.

  6. maerbale dice:

    lo de los megafans y las colas, ahora q lo ha dicho angie, no tiene precio…este verano vino bustamante al corte inglés a firmar autógrafos a las 8 de la tarde. pues cuando yo salí de trabajar la tarde anterior a las 4, había unas tías esperando. a la mañana siguiente cuando entré a las 10, estaban durmiendo en unas colchonetas hinchables…y lo más traumático fue ver como a las 4, cuando yo me iba, estaban despelotadas con microbikinis tomando el sol…era dantesco, porque estaban un «pelín» rellenitas y creo el bikini me pareció tan pequeño porque casi ni se les veía entre la carne…

  7. Anonymous dice:

    Joder, post largo, te lo has currao xD
    Por cierto lo de los robots esperadores…no creo que tarden en salir a la venta xDDD

  8. María dice:

    maerbaleeeeeee curras en el cortingles?

  9. morri dice:

    Gracias Boro ^^

    Maerbale: Ten ojo con lo que dices de las rellenitas, a ver si no van a poder llevar microbikinis o tangas por fuera del pantalón mostrando culo! XDDD Yo siempre digo que esas cosas son pa quien le quedan bien, pero oye, si dices eso queda la mar de «inpolíticamentecorresto» Y ojo, que toda chica o chico tenga los kilos que tenga si se arregla bien puede estar la mar de guapo, pero por favor, no a los microbikinis XDDDD Y encima haciendo cola para Bustamante, han perdido todo el sex-appeal, seguro que el Busta las coge de grupis xD

  10. Anonymous dice:

    Me explico…
    No se si pase lo mismo en Madrid, pero en Guadalajara, Mexico a la hora de comprar boletos para un partido, de semifinales o finales (en Mexico hay una especie de ligilla despues de la liga para ver quien es campeon), es casi imposible hacer fila en orden…la gente aqui se mete a la fila a quien quiera a la vista de los policias que ni pio dicen cuando se meten a la fila propios y extraños; se meten a la fila y aqui solo chiflan y ni quien los saque…no son iguales, digamos hay filas por nacionalidades ( se puede decir asi?)

  11. Anonymous dice:

    A mi las colas que realmente me ponen de los nervios son las típicas que hay de los parques de atracciones (rollo la del Dragon Khan). Si, esas que aparte de ser mega largas, tienen curvas de 180 grados como si de un circuito de Formula 1 se tratara xDD. Al final con tanta curva acabas hasta mareao. Además como estas colas tienen la particularidad de ser todo el rato curvas y mas curvas, parece que no avanzas nada y el tiempo se te hace eterno.

  12. graciasportusonrisa@hotmail.com dice:

    Pues que queréis que os diga…. Cuando vas a comprar algo a un sitio determinado, 1sabes de sobra que va a haber cola! Así que luego no te hagas el soprendido/a, porque ya sabías de antemano que te tocaría esperar.. a quien pretendes engañar?

    En fin, como iba diciendo, yo la verdad es que ya no me siento molesta haciendo cola. Todo es cuestión de asimilarlo, de que te sirve estar dando golpecitos con el pie, probar cuantas posturas eres capaz de hace sobre las dos piernas, suspirar diecisiete veces por segundo y demás estupideces con las que perder el tiempo?

    Es un lugar donde saco mis mejores conclusiones, medito, recuerdo los olvidos, incluso a veces creo que entro en un plano astral de esos.. Os lo juro!

    Y sino siempre puedes imaginar cualquier cosa sobre la vida de la persona que va delante tuya; por su corte de pelo, su colonia, su ropa o los productos que lleva en la cesta de la compra. Será de los que disimulan sorprenderse porque hay cola o habrá venido a pensar? Sólo lleva un paquete de galletas… Este es de los míos!!

  13. Anonymous dice:

    jaja esto de las colas estubo gennehal jaja las colas que mas me gustan o me molestan o no se que me dan son las que cuando hay ofertas en el super, la cola le da la vuelta completa al super jaja si por ejemplo tu eres el ultimo pero estas al lado del primero por que la cola ya dio la vuelta y volvio a llegar hasta donde esta el primero, y tu nomas te quedas viendo como el primero se va con su producto y ati todavia te falta mucho jaja

  14. fueza docente dice:

    Sabías que existen extensas teorías y definiciones matematicas que describen las colas?

    y, cambiando de tema: te interesa compartir links en el blog?

  1. 11/01/2014

    […] definitiva, estas señoras se apoderan de la cola del súper. Generan en un momento una aglomeración de personas esperando y un mejunje de palabras […]

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.