Intercambiar cromos por el mundo

cromos_repes

Cuando era crío solía coleccionar cromos, principalmente de fútbol. El señor Panini y otros colegas decidían hacer una distribución de cromos que hiciera prácticamente imposible terminar la colección si no tenías a un padre rico dispuesto a dejarse una morterada en pegatinitas. O algún padre loco muy friki. «¿Qué hay hoy de cenar mamá?» «Salteado de Zamorano con salsa de Romario» Todos teníamos a ese amigo de clase que tenía un taco de cromos repetidos, tripitidos e incluso algún taco de treinta veces el mismo cromo. Pero ah, el Costacurta del Mundial 94 no lo tenía eh. Había cosas que no las compraba el dinero y era la maldad de los creadores de colecciones de cromos.

Había siempre un cromo que era imposible de conseguir. A no ser que llamaras directamente a la editorial y se lo compraras directamente; lo que se consideraba en aquellos tiempos hacer trampa. Aunque cualquiera vería que era la decisión más inteligente y barata. Aún así, muchos buscábamos en el intercambio de cromos la posibilidad de completar nuestras colecciones usando nuestros cromos repetidos. «Enséñame tus repes» era la frase más repetida, valga la redundancia, a la hora del patio. Y ahí, mientras mirábamos los cromos de nuestros amigos íbamos diciendo la mítica cantinela:

– «Tengui, tengui, tengui, tengui, tengui, falti, tengui, tengui, falti, este no vale es una rodaja de chorizo, falti, tengui».

Todos los padres  querían intercambiar cromos con ella

Todos los padres querían intercambiar cromos con ella

Sí, ya sé, ya sé. No saltéis todavía. En todas las comunidades de este nuestro país no se decía «tengui» o «falti». ¡Resulta que hay múltiples variantes! Me enteré ayer mientras hacía un tuit sobre la acumulación de jugadores que hace Florentino, el presidente del Real Madrid. Sobre todo tras el fichaje de James Rodríguez. Florentino de pequeño era ese niño que tenía todos los cromos. Sin Costacurta, pero con todos los demás. Y a todo decía «tengui«. ¡Pero no! Aureal descubrió un mundo ante mí: en Madrid Florentino hubiera dicho: «Sile». O «Nole» para los pocos cromos que le faltaran. Pero nunca jamás habría dicho «tengui«.

¿De dónde viene sile y nole? Pues de Sí le tengo y No le tengo. Un leísmo como una catedral; pero son niños, se acepta todo. Cuando estábamos a punto de enzarzarnos en una guerra sobre cuál acepción es mejor, me dio por lanzar la pregunta al aire de Twitter. La cosa se hubiera quedado ahí sin la colaboración de Otis B. Driftwood, que tiene un chorro de seguidores, retuiteó mi demanda y empezaron a llegar variantes de toda la península. Juntas a un niño gallego y otro catalán en los años 90 y no se entienden. El choque de civilizaciones era esto.

Para reforzar mi versión me contestaron algunos catalanes, como un periodista de Salvados y mi admirado Manel Fontdevila. Después de que me contestara Manel decidí no lavar mi teclado en los próximos seis meses, más o menos. Bueno, para qué mentir, nadie lava un teclado.

Resulta que en Ceuta la gente dice «silo»/»nolo» que es la versión gramaticálmente correcta de la madrileña. En Galicia dicen «sipi»/»nopi». En Aragón dicen «lotén»/»nolotén» puesto que varios tuiteros de la zona lo afirmaban. Pero incluso en Madrid tienen otra variante al «sile» y «nole» que es el «lete»/»nolete«.

¿Cuál es la mejor versión? La mía, por supuesto. Y para ti la tuya. Lo que estoy seguro es que debe de haber aún más variantes allende los mares. Seguro que en sudamérica en cada uno de los paises tenían una forma distinta de intercambiar cromos. ¿Cómo se dice en otras partes del mundo? Iluminadme. Hoy en día no sé si se ha unificado la nomenclatura del intercambio con tanta globalización para que finalmente niños de todo el mundo puedan compartir sus cromos sin confusiones. A mí con diez años me dicen «lotén» y pienso que es una nueva marca de limpiacristales: «Lotén con bioalcohol». Y así no hay quién termine una colección.

1 respuesta

  1. 22/07/2014

    Información Bitacoras.com

    Valora en Bitacoras.com: Cuando era crío solía coleccionar cromos, principalmente de fútbol. El señor Panini y otros colegas decidían hacer una distribución de cromos que hiciera prácticamente imposible terminar la colección si no tenías a un padre r..…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.