Arrestan a una mujer por darle un porro a su hijo
Arrestan a una mujer en Washington por hacer el rito de iniciación porrera con su hijo de tan solo 22 meses. Al grito de «que rule, que rule» y en pleno éxtasis lisérgico, la madre Rachelle Braaten, pasó a su hijo una pipa de marihuana a la que el niño le dio una calada. Ya saben aquello de la mímica y lo de que como dirían nuestras – ellas sí, responsables – madres: «Se pega tó menoh lo bonitoh». La cosa no hubiera pasado a mayores si no fuera porque tuvieron la sana costumbre de grabarlo en vídeo.
Una persona anónima mandó el vídeo a la policía, no metido en un Powerpoint ni diciendo «ay qué gracioso el niño, empiezan jóvenes con el vicio», no. Lo envió para realizar una denuncia y poner a la madre porrera en un buen aprieto. Cuando llegaron los agentes se encontraron con 40 plantas de cannabis. Cuarenta. Tuvieron que entrar en la casa con machetes y ropa de explorador. Una vez se adentraron en la selva de la risa encontraron a la madre descojonándose con Splash. Muy fumada tenía que estar para eso.
Los dos niños se reían fuertemente de la situación y del uniforme Coronel Tappioca de los policías. Éstos se los llevaron a los servicios sociales para que los convirtieran en niños decentes. Por otro lado el padre confesó no estar en el momento de la grabación del vídeo «porque estaba de putas». La excusa de la madre fue que usaban el cannabis de forma medicinal y que era por eso que el niño estaba con el porrito. «No hay nada mejor para un resfriado, en caso de duda consulte con su farmacéutico, lea detenidamente las instrucciones de uso». Pero no coló.
El novio de la susodicha quedó puesto en libertad y ella permanece en prisión bajo fianza de 5000 dólares. «Vamos a tener que vender mucha maría para que salga de la cárcel, a ver si nos devuelven al niño y lo colocamos en una esquina. Un niño vende mucho» – debió pensar el novio. Seguiremos informando, o no.
¡Increíble! Ahora es cuando a unole provoca decir «¿El mundo está loco o qué?» Y si, van a tener que vender mucha maría.
Ahora es cuando a uno le entran las ganas de decir «El mundo está es jodidamente loco». Y sí, van a tener que vender mucha maría.
El mundo está completamente loco y no hay ninguna duda. Cada día me dan más la razón.
q loco mundo estamos demente….